Cuadradito quiere jugar en la casa grande de sus amigos Redonditos, pero no pasa por la puerta porque… ¡La puerta es redonda como sus amigos! «¡Tendremos que recortarte las esquinas!», le dicen los redonditos. «¡Oh, no! –dice Cuadradito– ¡Me dolería mucho!» ¿Qué podemos hacer?
Cuadradito es diferente. Nunca será redondo. El pequeño cuadrado prueba diferentes maneras para conseguir entrar; se estira, se tuerce, se dobla…pero nada funciona. Sus amigos desde dentro de la casa le animan: “Sé redondo”. El pequeño cuadrado lo intenta con todas sus fuerzas pero no lo consigue. ¿Cómo tratarán de resolver entre todos este problema?
Un libro sobre la amistad, la diferencia y la exclusión, con una propuesta gráfica muy original.
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